lunes, 26 de septiembre de 2011

Bibliografías de Verónica Márquez Castellano

BIBLIOGRAFÍA 1- La valoración    26-09-2011


Berman A., J.Snyder S., Kozier B., Erb G. Fundamentos de Enfermería: Conceptos, procesos y prácticas. Madrid: Pearson Educación; 2008


La descripción que hace este libro del proceso de valoración me ha parecido una de las más completas que he visto, me ha resultado muy interesante para incrementar mi conocimiento, no sólo de la valoración, si no de todas las fases del proceso de enfermería.

La valoración es la recogida sistemática y continua, organización, validación y registro de los datos (información).

Existen cuatro tipos diferentes de valoración: inicial, centrada en el problema, urgente y revaloración tras un tiempo. Las valoraciones varían según su objetivo, momento, tiempo disponible y estado del paciente.

Proceso de valoración


      a) Obtención de los datos - es el proceso de adquisición de la información sobre el estado de salud del paciente. Debe ser sistemática y continua. Se elabora una base de datos en la que se incluye la anamnesis de enfermería, la valoración física, la anamnesis y exploración realizadas por el médico, los resultados de las pruebas de laboratorio y diagnósticas y el material aportado por otros profesionales sanitarios. Se incluyen los antecedentes y los problemas actuales.
      Los tipos de datos que hay son: subjetivos (síntomas) y objetivos (signos). Los datos se obtienen de diferentes fuentes, las cuales son primarias  (paciente) y secundarias (familiares, otros profesionales sanitarios…)

Los métodos de obtención de datos son: la observación, la entrevista y la exploración.
La observación tiene dos aspectos: fijarse en los datos y seleccionar, organizar e interpretar los datos. La entrevista es una comunicación planificada de la que se obtiene información. Existen dos métodos para entrevistar: dirigido y no dirigido. La entrevista dirigida está muy estructurada y se obtiene información específica. La entrevista no dirigida permite al paciente expresarse con más libertad y el profesional tiene una visión más amplia del problema. Se recomienda alternar los dos métodos. La exploración física es un método sistemático de recogida de datos que usa la observación para detectar problemas de salud.

      b) Organización de los datos- los profesionales de enfermería usan un formato escrito para organizar los datos de la valoración de una forma sistemática (por patrones de Gordon)

      c) Validación de datos - es el acto de comprobar dos veces o verificar los datos para confirmar que son precisos y objetivos. No se validan todos los datos, como regla, el profesional de enfermería los valida cuando hay discrepancias entre los datos obtenidos en la entrevista y los de exploración física.

      d) Registro de datos - es fundamental. Se recogen de forma objetiva y no los interpreta el profesional. Se registran las propias palabras del paciente entre comillas.








BIBLIOGRAFÍA 2 - Infección e inflamación   3-10-2011


Berman A., J.Snyder S., Kozier B., Erb G. Fundamentos de Enfermería: Conceptos, procesos y prácticas. Madrid: Pearson Educación; 2008


He elegido este libro porque explica de una manera muy clara y detallada los procesos de infección e inflamación, con las fases y tipos de cada uno además del resto de mecanismos de defensa frente a una infección.

Una infección es una invasión del tejido corporal por microorganismos y su crecimiento en él. Este tipo de microorganismo se llama microorganismo infeccioso. 
Si no se producen signos clínicos de enfermedad, la infección se llama asintomática o subclínica. Los microorganismos varían en su capacidad de producir enfermedad (virulencia), en la gravedad de las enfermedades que producen y en su modo de transmisibilidad. 
Muchos microorganismos que no se consideran patógenos habitualmente pueden producir enfermedad en un individuo inmunodeprimido, se les conoce por el nombre de patógeno oportunista.

Los principales microorganismos que producen infecciones en los seres humanos son: bacterias (más comunes), virus, hongos y parásitos. 
La colonización es el proceso por el que las cepas de microorganismos se convierten en flora residente. La infección se produce cuando microorganismos recién introducidos o residentes invaden una parte del cuerpo en la que las defensas son ineficaces y el patógeno daña los tejidos. La infección se convierte en enfermedad cuando los signos y síntomas de la infección son únicos y pueden diferenciarse de otros trastornos.

Las infecciones pueden ser locales (se limitan a una parte específica del cuerpo) y sistémicas (si los microorganismos se diseminan y dañan diferentes partes del cuerpo).

Los sujetos normalmente presentan defensas que protegen al cuerpo de la infección. Estas defensas pueden clasificarse en: inespecíficas (barreras anatómicas y fisiológicas y respuesta inflamatoria) y específicas. Centraré mi atención en las defensas inespecíficas y dentro de ellas en la inflamación.
La inflamación es una respuesta defensiva local de los tejidos a una sustancia lesiva o un microorganismo infeccioso. 
Es un mecanismo adaptativo que destruye o diluye la causa lesiva, evita la propagación de la lesión y favorece la reparación del tejido dañado. Se caracteriza por cinco signos: dolor, tumefacción, enrojecimiento, calor y función alterada de la parte, si la lesión es grave. Las fases de la inflamación son:
1º Respuesta vascular y celular: los vasos sanguíneos de la zona de la lesión se contraen. A esto le sigue rápidamente la dilatación de los vasos sanguíneos pequeños. De este modo fluye más sangre a la zona dañada.
2º Producción de exudado: líquido que sale de los vasos sanguíneos, células fagocíticas y tisulares muertas. Fibrinógeno, tromboplastina y plaquetas forman una red entrelazada para evitar la propagación de la causa lesiva.
3ª Reparación: regeneración o sustitución de los tejidos dañados por tejido fibroso (cicatriz).



BIBLIOGRAFÍA 3 - Heridas y traumatismos  12-10-2011


Smeltzer SC, Bare BG. Enfermería medicoquirúrgica. Vol. II. 10ª Ed. Mexico: Mcgraw-Hill Interamericana; 2005. P. 2368-2370.


He elegido esta bibliografía porque cuenta el proceso de curación de la herida bastante bien, además de la rutina a seguir según las diferentes circunstancias en las que se nos puede presentar un traumatismo.


Las heridas que implican lesiones a los tejidos blandos varían desde desgarraduras leves a lesiones graves por aplastamiento. El principal objetivo cuando se presenta una herida, es restaurar la integridad física y la función del tejido lesionado, lo que se logra con una cicatriz mínima y sin infección. 
Es importante determinar cuándo y cómo ocurrió la herida debido a que el retraso en el tratamiento superior a 3 h incrementa el riesgo de infección.



Limpieza de la herida: rasuración del vello si precisa, se limpia la zona que rodea la herida con solución salina normal y se aseptiza con povidona yodada, pero nunca se permite que  penetre en la profundidad de la herida sin antes enjuagarla abundantemente. 
Se infiltra anestésico si es necesario. Después del tratamiento de aplica un apósito para protegerla.
La sutura de una herida depende de su naturaleza y de otros factores que se deben valorar. Si el cierre primario está indicado, se sutura. Este procedimiento consiste en la aproximación de grasa subcutánea sin presión mediante unas cuantas suturas para cerrar el espacio muerto. A continuación se cierra la capa subcuticular y por último la epidermis. Se realiza cierre primario retrasado cuando se ha perdido tejido o hay posibilidades de infección. Para este tipo de cierre se utiliza una capa delgada de gasa cubierta por un apósito oclusivo. Una vez que no hay signos de supuración la herida debe suturarse.
Al tratar a una persona con traumatismo (agresión al organismo) el registro es esencial. Se debe prestar atención a toda evidencia potencial. La enfermera al tratar un traumatismo debe tener cuidado de no cortar o alterar desgarraduras, agujeros o suciedad presentes en la ropa.  El registro debe incluir cualquier declaración hecha por la persona en sus propias palabras entrecomilladas.






BIBLIOGRAFÍA 4 - Tumores     17-10-2011




Moscow JA, Cowan KH. Biology of cancer. In: Goldman L, Ausiello D, eds. Cecil Medicine. 23rd ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier;2007:chap 187
Disponible en

He elegido este artículo porque desarrolla de una forma general y clara los distintos aspectos que definen los tumores.
Un tumor es una masa anormal de tejido corporal. Los tumores pueden ser cancerosos (malignos) o no cancerosos (benignos).
En condiciones normales, continuamente se están creando nuevas células para sustituir a viejas o realizar otras funciones. Los tumores ocurren cuando las células se dividen excesivamente en el cuerpo.
Problemas en el sistema inmune pueden conducir al desarrollo de tumores. Otras posibles causas son: consumo excesivo de alcohol, exposición excesiva a la luz solar, problemas genéticos, radiación, etc.
Los síntomas dependen del tipo y localización del tumor, algunos incluso pueden ser asintomáticos. En ciertos tumores, como el cáncer pancreático, los síntomas a menudo no comienzan hasta que la enfermedad ha alcanzado un estadio avanzado.
Los siguientes síntomas ocurren con la mayoría de los tumores: escalofríos, fatiga, fiebre, inapetencia, malestar general, sudores fríos, pérdida de peso.
Al igual que los síntomas, los signos de los tumores varían de unos a otros. La mayoría de los cánceres no se pueden ver durante un examen debido a están localizados en lo profundo del cuerpo.
Cuando se encuentra un tumor, se realiza una biopsía para determinar si éste es maligno o benigno.
La mayoría de pacientes que tienen tumores se someten a una tomografía computarizada o resonancia magnética para determinar la ubicación exacta del tumor y qué tan lejos se ha diseminado.  Otros exámenes abarcan: exámenes de sangre, biopsia de médula ósea…
El tratamiento varía con base en:
- El tipo de tumor
- Si es o no canceroso
- Su localización
- Si el tumor es benigno algunas veces no se necesita ningún tratamiento.


Si un tumor es canceroso, los posibles tratamientos abarcan: quimioterapia, radioterapia, cirugía y una combinación de estos métodos (en muchas ocasiones, la cirugía se asocia a quimioterapia o radioterapia)
Si el cáncer está en un lugar concreto generalmente se extirpa directamente con cirugía, al igual que si el tumor se ha diseminado únicamente a ganglios linfáticos locales. Si todo el cáncer no se puede extirpar con cirugía, las opciones de tratamiento son la radioterapia, la quimioterapia o ambas.
El pronóstico varía enormemente según los diferentes tipos de tumores. Si el tumor es benigno, el pronóstico generalmente es muy bueno. Sin embargo, existen algunos casos en los cuales un tumor benigno puede ocasionar problemas considerables, como en el cerebro.
Si el tumor es maligno, el desenlace clínico depende del tipo y estadio del tumor al momento del diagnóstico. 
Algunos cánceres se pueden curar. Otros que son incurable se pueden someter a tratamiento para paliar el efecto, aumentando la esperanza de vida. Sin embargo, otros tumores son potencialmente mortales de una manera rápida.
Se pueden presentar complicaciones si el tumor está ubicado en una región del cuerpo donde afecta el funcionamiento del órgano normal. Si el tumor es maligno, también puede causar complicaciones en caso de que se disemine (haga metástasis).
Se puede reducir el riesgo de tumores cancerosos: consumiendo una dieta saludable, haciendo ejercicio de manera regular, consumiendo alcohol con moderación, usando protección correcta frente al sol, etc.




BIBLIOGRAFÍA 5 - Cuidados terminales   28-10-2011



Staats CR, Pollard KA, Brown CE. Cuidados terminales. En: Lewis S, Heitkemper M, Dirksen S. Enfermería Médicoquirúrgica: Valoración y cuidados de problemas clínicos Vol I. 6ª ed.  Madrid: Elsevier; 2004.p. 165-178.

He elegido este libro porque me ha resultado muy interesante la forma en que plantea el tema, además de que acompaña la explicación con tablas que resumen de una manera muy eficaz lo expuesto en el texto.


El cuidado terminal es el término usado actualmente para los temas relacionados con la muerte y la agonía. La muerte ocurre cuando dejan de funcionar todos los órganos y sistemas vitales. Conforme se aproxima la muerte, disminuye el metabolismo y la actividad corporal se frena gradualmente,  hasta que terminan todas las funciones vitales.

Algunas manifestaciones físicas son: sensibilidad disminuida, visión borrosa, ojos hundidos y vidriosos, ausencia del reflejo de parpadeo, piel fría y húmeda, cianosis de la nariz, frecuencia respiratoria aumentada, dificultad para toser y eliminar secreciones, disminución gradual de la diuresis, lentitud del tracto digestivo, acumulación de gas, caída de la mandíbula, dificultad para hablar, pérdida del reflejo nauseoso, disminución de la presión arterial…

La enfermera no solo debe esforzarse por aliviar el dolor físico, también cuida al individuo en todos los aspectos del sufrimiento: físico, mental y espiritual.

El duelo es la respuesta emocional y conductual frente a una pérdida. 
Se trata de una reacción necesaria  para mantener tanto el bienestar físico como emocional. El duelo se puede manifestar de muchas formas, ya que cada pérdida es diferente y cada persona única.

La persona que llega al final de su vida, necesita cuidados especializados. Un aspecto muy importante que deben tener en cuenta los profesionales de la salud a la hora de proporcionar cuidados terminales son las diferencias culturales. Según las creencias del paciente y la familia, afrontarán la muerte de una forma u otra.

Cuidados paliativos son la atención sanitaria destinada a controlar los síntomas, sin intentar la curación de enfermedades que ya no responden al tratamiento.
El cuidado paliativo se centra en intervenciones para aliviar los síntomas y no en medidas curativas. Enfoca la atención sanitaria en permitir la muerte natural, con control del dolor y de otros síntomas, y prestación de soporte psicosocial. Los cuidados paliativos se limitan a los últimos 6 meses de vida previstos.

La intervención enfermera se centra en las manifestaciones psicosociales y el proceso de duelo, así como en los cambios físicos asociados con la muerte. El paciente y la familia deben constituir el foco del cuidado enfermero. El respeto, la dignidad y el bienestar son importantes para el paciente y la familia. Además, las enfermeras y otros profesionales que prestan cuidados deben reconocer sus propias necesidades, cuando se enfrentan con el duelo y la muerte.




BIBLIOGRAFÍA 6 – Valoración del sistema tegumentario

Dirksen SR. Valoración enfermera: Sistema Tegumentario. En: Lewis S, Heitkemper M, Dirksen S. Enfermería Médicoquirúrgica: Valoración y cuidados de problemas clínicos Vol I. 6ª ed.  Madrid: Elsevier; 2004.p. 490-499

He escogido este libro porque desarrolla de una manera clara los conceptos relacionados con lo visto en clase sobre la piel y porque expone la valoración que debe realizar la enfermera a un paciente con problemas dermatológicos.

El sistema tegumentario es el órgano corporal más amplio y está compuesto de piel y apéndices cutáneos (pelo, uñas y glándulas). 

La piel está dividida en tres capas:

1. Epidermis: es la capa más superficial y está formada por melanocitos y queratinocitos principalmente.
2. Dermis: es el tejido conectivo que está debajo de la epidermis.
3. Tejido subcutáneo: no forma parte de la piel, pero se estudia junto a ella porque es el encargado de unirla a los tejidos subyacentes.

La función principal de la piel es proteger las capas subyacentes del cuerpo, sirviendo como una barrera superficial ante el ambiente externo. Además actúa como barrera frente a bacterias, virus y pérdidas excesivas de agua.

Valoración:

Se examinan áreas específicas de la piel durante la exploración de otras áreas del cuerpo, excepto si el padecimiento principal es dermatológico. 
La piel en estado normal debe presentar: tono homogéneo, buena turgencia y ausencia de petequias, púrpuras, lesiones o excoriaciones. Las uñas deben tener un tono rosado y ser móviles. El pelo debe estar brillante y abundante.

Se deben recoger datos subjetivos aportados por la historia clínica y por la entrevista realizada al paciente siguiendo los patrones funcionales de salud.

Los datos objetivos se obtendrán por la exploración física:

a) Las lesiones cutáneas primarias: se desarrollan en una piel no alterada previamente y son: mácula, pápula, vesícula, placa, habón y pústula.

b) Las lesiones cutáneas secundarias: son las que aparecen posteriormente. Fisura, escama, cicatriz, úlcera, atrofia, exocoriación.

La piel se inspecciona respecto al color general y su pigmentación, vascularización o roces y presencia de decoloraciones. 
Si se encuentran lesiones en la piel se deben registrar el color, tamaño, distribución, localización y configuración.
Se debe palpar la piel para proporcionar información sobre la turgencia, temperatura, movilidad, humedad y textura.

Los estudios diagnósticos proporcionan información importante a la enfermera para diagnosticar la afección del paciente y para planear intervenciones apropiadas.



BIBLIOGRAFÍA 7 - Quemaduras   7 - 11 - 2011


 Knipe CJ. Valoración enfermera: Sistema Tegumentario. En: Lewis S, Heitkemper M, Dirksen S. Enfermería Médicoquirúrgica: Valoración y cuidados de problemas clínicos Vol I. 6ª ed.  Madrid: Elsevier; 2004.p. 527-553

He elegido este libro porque trata el tema de las quemaduras de una forma muy extensa, explicando todos los aspectos relacionados con ellas y además incluye planes de cuidados de enfermería para tratar a los pacientes con quemaduras. Este libro en general me parece un buen complemento para la ayuda al estudio de la asignatura.

La quemadura ocurre cuando existe una lesión de los tejidos corporales producida por calor, agentes químicos, corriente eléctrica o radiación. Los efectos resultantes están influidos por la intensidad de la energía, la duración de la exposición y el tipo de tejido lesionado.

Los tipos de lesión por quemadura son: quemaduras térmicas, químicas, por humo e inhalación, eléctricas,  y térmicas por frío.

Clasificación de las quemaduras

El tratamiento de las quemaduras depende de la gravedad de la lesión. Esta gravedad se determina por:

1. Profundidad: una quemadura implica destrucción del sistema tegumentario. Según la profundidad se clasifican en:

a) Destrucción cutánea de grosor parcial:

          Primer grado (superficial): desvitalización superficial con hiperemia
          Segundo grado (profunda): epidermis y dermis afectadas en profundidad variable.

b) Destrucción cutánea de grosor total:

      Grados tercero y cuarto: destrucción de todos los elementos de la piel y terminaciones nerviosas.

2. Extensión de la quemadura (porcentaje del área de la superficie corporal total)

3. Localización de la quemadura: se relaciona con la gravedad.

4. Factores de riesgo del paciente: un anciano cura más lentamente y puede presentar más dificultad en la rehabilitación que el joven.

Manifestaciones clínicas:

El paciente quemado puede estar en shock por el dolor y la hipovolemia. Con frecuencia, las áreas de quemaduras de grosor total están inicialmente anestesiadas debido a que las terminaciones nerviosas han sido destruidas.  Las quemaduras superficiales y moderadas son dolorosas y pueden presentar ampollas llenas con líquido y proteínas.

Tratamiento

El tratamiento depende de la fase de la quemadura:

Fase de urgencia (período de tiempo requerido para resolver los problemas inmediatos que originan las quemaduras)
Se debe prestar atención al cuidado de las vías aéreas, iniciar fluidoterapia,  cuidado de la herida , estado nutricional.
Farmacoterapia: se administrarán analgésicos y sedantes.

Fase aguda (comienza con la movilización del líquido extracelular y la diuresis subsiguiente)
Cuidado de la herida, escisión e injerto, tratamiento del dolor, terapia física y ocupacional y atención psicológica.

Fase de rehabilitación (las heridas por quemadura están cubiertas con piel o curadas)
Paciente y familia aprenden cómo cuidar una herida.


BIBLIOGRAFÍA 8 -  VIH y SIDA  (14-11-201

Fransi Galiana L, Aguado Taberna C, Atención Primaria en la Red [sede Web]. La Coruña: Fisterra.com; 2011 [actualizada el 14 de abril de 2011; acceso 14 denoviembre de 2011]. Disponible en: http://www.fisterra.com/guias2/vih.asp


He elegido esta bibliografía porque esta página me parece muy interesante. Muchas veces creemos que encontrar información fiable en internet es complicado, sin embargo, esta página, creada por médicos y dirigida a profesionales de la salud y también a pacientes, cuenta con un equipo profesional que proporciona información tan fiable y completa como cualquier libro.

El papel clave del médico de AP es la prevención y el diagnóstico precoz de la infección por VIH.

España sigue siendo uno de los países con más incidencia de VIH, aunque ha bajado desde la extensión del tratamiento con antirretrovirales.

En la Atención Primaria se deben realizar las siguientes tareas:
- Resolver las dudas y proporcionar información a los pacientes
- Detección y atención de personas con prácticas de riesgo
- Atención a las personas seronegativas.
- Derivación de personas infectadas
- Atención a personas infectadas o enfermas en coordinación con el centro hospitalario.
- Atención y seguimiento de los pacientes que se nieguen a realizar tratamiento antirretroviral.
-Atención y seguimiento de personas en situación terminal que no requieran ingreso hospitalario.
- Contribuir a la adherencia al tratamiento antirretroviral de nuestros pacientes.
- Tratamiento de las patologías de los pacientes seropositivos que no requieran ingresos o tratamientos hospitalarios


Vías de transmisión del VIH

Existen tres únicas vías de transmisión demostradas:
  1. Transmisión sexual. Actualmente es la vía más frecuente de transmisión de la infección.
  2. Transmisión parenteral. Por exposición a sangre, sus derivados o tejidos trasplantados.
  3. Transmisión vertical (perinatal). De madre infectada a su hijo durante el embarazo, el parto, o la lactancia.
 Pruebas de detección del VIH

El análisis de  sangre venosa (EIA) es la prueba más utilizada para la detección de anticuerpos frente al VIH.

Existe también una prueba rápida del VIH en saliva y orina que puede dar los resultados en sólo 20 minutos. 
Todas las pruebas del VIH que resultan positivas deben ser seguidas por otra prueba para confirmar el resultado positivo.

La realización de serología  frente a VIH está indicada cuando:
- Detección de conductas de riesgo:
- Sospecha clínica (
Infecciones de transmisión sexual, tuberculosis…)
- Otras situaciones (
Parejas que no quieren utilizar métodos barrera, postexposición)
 Para clasificar a los pacientes se utiliza la clasificación de los CDC en los que se consideran los datos clínicos y el número de linfocitos.
Categoría A: infección primaria y a los pacientes asintomáticos con o sin linfadenopatía generalizada persistente
Categoría B: se aplica a los pacientes que presentan o han presentado enfermedades relacionadas con VIH
Categoría C: se aplica a pacientes que presenten o hayan presentado alguna de las complicaciones ya incluidas en la definición de SIDA cuando el paciente tiene una infección por el VIH bien demostrada y no existen otras causas de inmunodeficiencia que pueda explicarla.
Tratamientos preventivos: Quimioprofilaxis de las infecciones oportunistas, Vacunaciones en el paciente VIH positivo (tétanos, triple vírica…)


tratamiento de la infección por el VIH:  dieta, los tratamientos de las distintas patologías infecciosas y tumorales presentes en la misma y el tratamiento antirretroviral.









No hay comentarios:

Publicar un comentario